La sostenibilidad empresarial se ha convertido en un imperativo en el mundo actual, donde la responsabilidad social y ambiental desempeñan un papel crucial en la percepción de una empresa. La sostenibilidad va más allá de buscar únicamente la rentabilidad financiera. Implica comprometerse con la protección del medioambiente, el desarrollo social y un crecimiento económico equitativo. Para lograr una empresa sostenible, es esencial considerar los tres ámbitos de sostenibilidad: ambiental, económica y social.

Acciones para que tu empresa sea más sostenible

Sostenibilidad ambiental

• Consumo energético: Iniciar iniciativas internas, como apagar equipos no utilizados, y la implementación de sistemas más eficientes contribuyen a reducir el consumo energético y la huella medioambiental. Esto no solo beneficia al planeta, sino que también puede resultar en ahorros significativos en la factura energética de la empresa.
• Residuos: La gestión de residuos es un aspecto crucial de la sostenibilidad. Aplicar las 7 R del reciclaje (rediseñar, reducir, reutilizar, reparar, renovar, recuperar y reciclar) puede llevar a una gestión más eficiente y responsable de los residuos generados por la empresa.
• Ecodiseño: Integrar el ecodiseño en la economía circular implica incorporar criterios ambientales en la etapa de diseño y desarrollo de productos o servicios. Utilizar materiales sostenibles y reciclables es una práctica común en esta estrategia.

Sostenibilidad Económica

La sostenibilidad económica implica la adopción de prácticas financieras rentables que sean social y ambientalmente responsables. Para alcanzar este equilibrio, las empresas deben seguir los principios ESG (medioambientales, sociales y de gobernanza en español).

Responsabilidad Social

La responsabilidad social empresarial va más allá de lo económico. Incluir a los empleados en la estrategia de sostenibilidad, garantizar condiciones de trabajo dignas, promover los derechos humanos y colaborar en problemas sociales son prácticas que contribuyen a una sostenibilidad económica y social.

• Formación y desarrollo: La formación ambiental y educativa para los empleados es esencial para construir una cultura de sostenibilidad dentro de la organización. Los empleados son elementos clave para el éxito de cualquier estrategia de sostenibilidad.
• Proveedores locales: Contratar proveedores locales no solo impulsa la economía de proximidad, sino que también reduce la huella de carbono al adoptar un enfoque de “kilómetro cero” en el entorno laboral.